La Diputación de Pontevedra y el Concello de Ponteareas dieron a conocer en la tarde de ayer un Estudio de Movilidad que propone aumentar un 18% el espacio público con prioridad peatonal en el municipio. El documento, financiado por la institución provincial, pretende sentar las bases a corto, medio y largo plazo para conseguir una movilidad "más humana", en palabras del organismo provincial, en el núcleo urbano de la villa.

Acompañados del diputado provincial de Movilidad, Uxío Benítez, y del regidor ponteareano, Xosé Represas, los autores del proyecto señalaron que el primero de los ejes principales del documento se basa en establecer un modelo de prioridad peatonal y ciclista, aumentando la superficie destinada al peatón hasta, por lo menos, el mencionado 18 por ciento de la total.

El segundo eje se centra en varias medidas concretas que permitirían alcanzar ese porcentaje. Una de ellas es la redefinición de las grandes vías de paso y acceso al núcleo urbano (N-120, PO-254, PO-403, EP- 4006 y EP-4001), limitando a dos los viales que darían acceso a la villa, uno situado en la avenida Castelao (PO-403) a través de la Rúa Castiñeira y otro en la avenida de Galicia a través de la Rúa Vidales Tomé. Ambas vías serían las únicas que podrían atravesar el centro de Ponteareas.

El Estudio de Movilidad también apunta la posibilidad de construcción de una nueva variante que conecte la carretera de As Neves (EP-4006) y la Rúa Trobador Xoán de Guillade (EP-4001), "ya que su realización posibilitaría reducir vehículos en el interior de la trama urbana, dejando las vías que continúan hacia el centro con prioridad peatonal y ciclista", según señaló ayer el arquitecto Luciano Alfaya.

Según los técnicos del estudio, la construcción de un aparcamiento en la antigua fábrica de Granitos, en el contorno del supermercado Froiz, "contribuiría a evitar la entrada de vehículos manteniendo un esquema parecido al que sucede en fechas señaladas como la fiesta del Corpus". Además, otro de los datos relevantes facilitados en la jornada de ayer está relacionado con que el 75 por ciento de las aceras del casco urbano ponteareano tiene menos de 1,80 metros de ancho. Una de las recomendaciones del documento pasar por aumentar la anchura de una buena parte de estas aceras hasta los 2,5 metros.

Benítez aseguró que "este documento marca las potencialidades que Ponteareas puede desarrollar y que rompe la tendencia anterior para pasar de un modelo orientado al automóvil hacia un modelo orientado a los peatones en el que la movilidad peatonal es prioritaria en el núcleo urbano".

Represas, por su parte, señaló que "se trata de un documento flexible que pretende favorecer al comercio y a la hostelería", claves en la economía municipal.