Una patrulla de la Guardia Civil multó el pasado lunes a una docena de vehículos que se encontraban mal estacionados en las inmediaciones del colegio Outeiro das Penas de Cesantes a la hora de la entrada de los alumnos, una situación que desde el BNG denuncian como un "acto de represalia" por parte del Partido Popular por la reunión mantenida la semana pasada del diputado nacionalista Luís Bará con representantes vecinales de esta parroquia para reclamar medidas de seguridad vial en esta zona de la N-550.

La formación nacionalista considera que con la presencia de los agentes "se pretende meter miedo a la vecindad para que calle ante una situación peligrosa, a la que Fomento no le quiere dar solución", y considera "paradójico" que mientras la Guardia Civil estaba multando a los vehículos, muchos niños tenían que cruzar la carretera nacional sin que exista un paso de peatones y sorteando el intenso tráfico. "Esto deja a las claras el objetivo de esta campaña de Tráfico, que prefieren sancionar en vez de regular el tránsito" para garantizar la seguridad vial".