Los trabajos del nuevo instituto público de Soutomaior avanzan a buen ritmo y dentro del plazo previsto. Así lo confirmaron ayer los responsables técnicos de la obra durante una visita realizada por el alcalde de la localidad, Agustín Reguera, y el delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves, que aseguró que el centro educativo funcionará en el curso 2018/19.

Tras el movimiento de tierras realizado en la parcela que ocupará el edificio, las labores se centran en la actualidad en los cimientos, que están prácticamente finalizados. El responsable de los trabajos explicó que para finales de este verano ya debería estar rematada la estructura principal del inmueble.

El nuevo instituto, en el que la Consellería de Educación invierte más de 5,3 millones de euros, tendrá capacidad para 480 alumnos, con doce unidades de ESO y cuatro de Bachillerato. Su construcción cubre la necesidad educativa de uno de los municipios con mayor índice de natalidad de Galicia. Esto se traduce en una gran necesidad de plazas escolares para los próximos años que, al ser cubierta, ayudará a fijar la población en el municipio, contribuyendo así a su crecimiento.

En este sentido, el alcalde de Soutomaior declaró que se trata "de una obra fundamental para el futuro del municipio, por lo que las instituciones debemos mantener una actitud vigilante y ayudar a que todo avance de la mejor manera". Por su parte, el delegado territorial de la Xunta en Vigo, López-Chaves, manifestó que este centro "viene a cumplir el compromiso del departamento educativo de la Xunta con las crecientes necesidades de plazas de escolarización que tiene Soutomaior y para el que la Xunta destinará más de 5 millones de euros". Asimismo indicó que esta actuación se incluye en el plan de la consellería de Dotación de Infraestruturas Educativas 2016-2020, que cuenta para 2017 con un presupuesto inicial de 26 millones de euros.

El instituto público se ubicará en una parcela de unos 23.000 metros cuadrados, próxima al cementerio de Arcade y los trabajos, que arrancaron en septiembre del año pasado, cuentan con un plazo de ejecución de 18 meses.

Diseño moderno

El edificio, con un diseño moderno con fachadas de piedra y cubierta a dos aguas, estará integrado con el entorno y adaptado a la orografía del terreno. El proyecto está firmado por el Estudio Normiella, que ha previsto una estructura modular que permitirá realizar futuras ampliaciones a un coste mínimo, en el caso de que se necesitará una mayor capacidad en un tiempo.

Este nuevo centro educativo contribuirá a descongestionar el actual CPI Manuel Padín Truiteiro, permitiendo que este colegio se centre en las enseñanzas de infantil y primaria.