Hace seis meses que la Xunta dio luz verde al desbloqueo del polígono de A Pasaxe y la demanda de firmas que quieren instalarse en el área industrial de Vincios se ha disparado en un 50%. Desde que el Gobierno gallego aprobó en septiembre el plan sectorial que permitirá legalizar las 180 compañías que operan en la zona y urbanizar su entorno, la lista de espera que maneja la asociación de empresarios ha pasado de una veintena de solicitudes a más de una treintena, según asegura su gerente, José Manuel Rodríguez Pérez.

La lentitud de la tramitación burocrática que requerirá el desarrollo del proyecto sectorial para poner fin a medio siglo de ilegalidades urbanísticas contrasta con el rápido crecimiento del interés que el polígono despierta entre el sector empresarial del área de Vigo. Una docena de sociedades han mostrado su intención de trasladarse al recinto gondomareño, en su mayoría auxiliares de la automoción y del naval y firmas logísticas, indica Rodríguez.

Se trata de medianas empresas que han reclamado naves o terrenos de entre 1.000 y 7.000 metros cuadrados y se prevé que sumarán más de medio centenar de puestos de trabajo a los 3.300 existentes en el polígono. Estos potenciales empleos suponen tan solo una mínima parte de los 1.200 previstos por la patronal en cuanto el parque empresarial esté completamente legalizado y urbanizado, momento en el que dispondrá de hueco para incorporar a la treintena de compañías que ya figuran en cola y a otras que lo soliciten.

Los empresarios atribuyen el aumento de la demanda a varios factores. La legalización del polígono es para ellos clave, pero no su único atractivo. José Manuel Rodríguez destaca la ubicación estratégica de A Pasaxe y el despegue de la automoción y del naval, "que quieren proveedores cerca". "No hay nadie que esté más próximo a los servicios de Vigo que nosotros, a cinco minutos por autopista", recalca. "Éramos competitivos incluso antes de que se aprobase el plan sectorial y ahora todavía lo seremos más", señala.