En la era de la electrónica y la realidad virtual, conocer juguetes con los que se divertían los niños a principios del siglo XX es como viajar en el tiempo. La exposición que un coleccionista de Cesantes, Juan Alfaya, ha abierto estos días por primera vez al público en el Círculo Cultural de la parroquia, deja boquiabiertos a niños y mayores. Son más de un centenar de piezas, la mayor parte de latón, y procedentes de diversos países. Algunas tienen más de un siglo de antigüedad. "La muestra es fruto de 15 años coleccionando, en colaboración con el vecino de Redondela José 'O Porrón", apunta Alfaya.

A modo de visita guiada, Juan Alfaya explica al público el origen de los juguetes y muestra in situ su funcionamiento. "Los juguetes eran cosa de ricos", dice, "por eso vienen de países como Francia, Alemania, Estados Unidos o incluso Uruguay y Argentina, porque a principios del siglo pasado eran países pujantes". También hay ejemplares fabricados en España "de buenas marcas de la época como Casa Rico o Payá". Los adquieren en ferias especializadas, anticuarios "y ahora por Internet".

Destaca Alfaya que el juguete no solo es "para contemplar", sino que "debe tener movimiento". Además subraya su carácter educativo y que "son el reflejo de la sociedad de su época". En la exposición se puede ver por ejemplo la miniatura de una escuela de los años 30 "donde la profesora es una monja, todas las alumnas son rubias (debe de ser la copia de una de Alemania) y por supuesto, vestidas de uniforme".

Una bailarina automática de procedencia norteamericana, tiovivos con música incorporada o un teatrillo de los años 40, con libretos incluidos, son otras de las piezas a la vista en Cesantes. En otra mesa hay barcos con su propio sistema de motor a vapor que los hace circular sobre el agua. Acróbatas, osos o "la mujer que barre" se accionan con una llave para darles cuerda.

La exposición no es por tanto solo sobre juguetes, sino sobre la sociedad del siglo XX. Se puede visitar de lunes a viernes de 17 a 20 horas, hasta el 8 de enero.