Momento clave en la investigación del siniestro que acabó con la vida de un joven de 25 años y causó heridas a otros cuatro en Gondomar en la madrugada del 18 de septiembre. Un equipo de reconstrucción de accidentes de la Guardia Civil de Tráfico reprodujo ayer lo ocurrido sobre el escenario del suceso, el kilómetro 18 de la PO-340, en busca de datos que permitan esclarecer a qué velocidad circulaba el Mercedes AMG en el que viajaban los cinco chicos tras una noche de fiesta.

Se trata de un vial limitado a 50 kilómetros por hora y las primeras averiguaciones apuntan a un exceso de velocidad por parte del conductor, citado en calidad de investigado por un delito contra la seguridad vial por parte del Juzgado de Instrucción Número 8 de Vigo, que se encarga de la investigación.

Tras el aparatoso siniestro en el que el vehículo se desplazó sin control en zig zag a lo largo de 300 metros después de impactar contra unas rocas, el piloto dio positivo en la prueba de alcoholemia, con un resultado de 0,36 milígramos por litro de aire espirado, una cifra que en sí misma no implica la imputación del citado delito, aunque en este caso concurren circunstancias como la posible infracción del límite de velocidad establecido en una travesía urbana.