Dos agentes de la Guardia Civil de O Porriño rescataron en la tarde del pasado domingo, 11 de diciembre, a un vecino de Atios que había quedado atrapado en un árbol tras fallar en un intento de suicidio. Según ha podido saber Faro de Vigo, cuando la pareja de la Benemérita llegó al lugar de los hechos, el varón se encontraba con una pierna encajada entre las ramas y una cuerda fuertemente atada al cuello, a unos dos metros del suelo aproximadamente.

La Guardia Civil tuvo constancia de los hechos alrededor de las 15.30 horas, cuando el Centro Operativo de Servicios recibió aviso de una llamada de auxilio de un hombre que se encontraba en la parroquia porriñesa de Atios y que estaba completamente atrapado en un árbol después de haber intentado suicidarse. Tras dar aviso a la patrulla más cercana, un par de agentes procedieron a iniciar la búsqueda por la zona que el varón afectado había indicado, cerca de la estación en la que se realiza la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).

Búsqueda exhaustiva

Después de media hora de búsqueda, ambos efectivos volvieron a llamar al Centro de Operaciones para informar de que no eran capaces de dar con él y pidieron más referencias para continuar la batida. Fue entonces cuando desde la centralita permitieron que el afectado hablara directamente con los dos agentes que estaban peinando la zona, quienes tomaron como punto de apoyo la presencia de una pequeña población de acacias para poder dar con él, pidiéndole que intentara gritar para dar pistas de sus posición. Los guardias civiles, a su vez, avisaban de su presencia cada cierto tiempo para comprobar si el afectado podía escucharlos.

Cuando finalmente localizaron su paradero, en torno a las 16.20 horas (casi una hora más tarde de recibir el primer aviso), comprobaron que el hombre tenía una pierna atrapada entre dos ramas y el tronco superior del cuerpo ligeramente inclinado hacia delante, además de una cuerda muy apretada al cuello que le impedía respirar con normalidad. Formando una especie de torre, uno de los guardias pudo subir hasta el punto en el que se encontraba el hombre, siendo capaz de desenganchar su pierna y cargándolo hasta el suelo desde una altura de dos metros.

Tras recorrer los dos kilómetros que los separaban del lugar en el que habían aparcado el coche patrulla, dieron aviso a una ambulancia que primero lo trasladó al centro de salud de Porriño y posteriormente al hospital Álvaro Cunqueiro.

El hombre se encontraba en una zona de monte de la parroquia porriñesa en la que se ubican varias fincas sin trabajar, a unos cuatro kilómetros de la ITV de Porriño.