Nadie se presenta para presidir el club de jubilados de A Guarda, que cuenta con más de medio millar de socios. Los problemas comenzaron cuando el anterior presidente se vio obligado a dejar el cargo por problemas de salud. Desde ese momento, se hicieron responsables de forma eventual miembros de su directiva con el compromiso de convocar un pleno en el que debían presentarse nuevos candidatos para llevar el club, y así lo hicieron pero no se presentó nadie. Si no se presenta nadie antes de fin de año el club desaparecería. La directiva provisional planteó el problema al alcalde, Antonio Lomba, y a la edil de Servicios Sociales, Tere Vicente. Los responsables municipales creen que este club no es solo de los jubilados sino de todos los vecinos y esperan que exista pronto un compromiso para mantener viva la asociación.