Niños de Salceda de Caselas participaron ayer en la plantación de tres árboles usando el primer compost "maduro" de un proyecto puesto en marcha por la Diputación de Pontevedra en varios concellos de la provincia, que pretende reducir los residuos orgánicos en los concellos para ahorrar el coste de Sogama.

Según los técnicos que participaron en el acto, con la instalaciones de composteros en todos los concellos se podría reducir la basura un 40%, y reutilizar el abono resultante para mejorar los suelos, un proyecto que deja ser una utopía para convertirse en una pequeña realidad.

El acto simbólico de inauguración del primer compost contó con la presencia del vicepresidente provincial, César Mosquera, con el alcalde de Salceda, Marcos Besada, y otros concejales del gobierno local, además de vecinos.

El primer compost

"Hoy llegamos al final del primer paso. Este es el primer compostero comunitario de los que colocó la Diputación del que sale el compost maduro después de tres meses y medio de comenzar a aportar. Ese resultado final simbólicamente se usa para plantar unos árboles, pero ahora hay que convertir el compostaje en un verdadero sistema de gestión de la basura para Salceda", indicó el Mosquera.

El vicepresidente explicó que la Diputación lleva invertido en compostaje durante este ejercicio aproximadamente un millón de euros en toda la provincia, pero señaló que con la modificación de crédito aprobada y el presupuesto del año próximo se superarán los cuatro millones de euros.

"Es una apuesta de cabeza por el compostaje como fórmula para reducir la basura. Como vicepresidente de la Diputación esta es mi prioridad absoluta", subrayó, para destacar que no tiene ningún sentido que la basura orgánica, que es agua mayoritariamente, se queme en Sogama después de recorrer cientos de kilómetros, lo que tiene una huella ecológica "terrorífica" con unas emisiones de CO2 "inmensas". "Sólo la reducción del CO2 y el reaprovechamiento del compost para mejorar los suelos creemos que vale este esfuerzo y todos los que se puedan dedicar", afirmó.

El vicepresidente recordó que ahora mismo está en marcha a segunda fase del Plan Revitaliza, para la que los ayuntamientos de la provincia pueden presentar solicitudes de adhesión hasta el 19 de diciembre. Destacó que la primera fase fue de sensibilización y didáctica para la ciudadanía, para demostrar que los composteros comunitarios crean menos problemas que un colector normal en la calle y que el esfuerzo para vecinas y vecinos es menor que el actual.

"El siguiente paso es convertir de verdad el compostaje en un sistema de gestión universal de residuos. La idea es que todos los ayuntamientos que se adhieran al Plan Revitaliza tengan el respaldo provincial. La Diputación va a hacer todos los esfuerzos posibles para ayudarles y llegar al residuo cero, que los orgánicos que salgan del ayuntamiento sean cero, que queden allí, se traten y reaprovechen reduciendo los costes del tratamiento", explicó. De hecho, durante este año se destinarán 1,25 millones de euros a la compra de composteros para repartir entre los ayuntamientos.

Economía y ecología

El alcalde de Salceda, Marcos Besada, aseguró que "la unión hace la fuerza". Destacó que la unión de los ayuntamientos de la provincia, avalada por la Diputación, "tiene que llevarnos a objetivos fundamentales como es reducción de la fracción orgánica de la basura siguiendo una motivación económica pero también ecológica.

Asimismo, subrayó que además de reducir el impacto del CO2, con el compostaje también se abordará un tema muy importante para las familias: el coste a nivel fiscal que supone el reciclaje y tratamiento de la basura. "Estamos hablando que el 40% de lo que se echa en el colector verde es basura orgánica que se puede compostar y se reducimos los costes de llevarlo a Sogama no nos veremos obligados a subir el recibo de la basura y contribuimos a que las familias, durante la crisis, con un pequeño esfuerzo puedan mejorar su día a día".