Más de 200 vecinos del barrio de Vaquería, en la parroquia porriñesa de Budiño, se han unido para reclamar la supresión de una línea continua presente en el vial autonómico que une Porriño con Salceda, el PO-510. Lo han hecho porque según explica Balbino Fernández, representante de los vecinos en este caso, "llevamos casi tres años (desde que cambió la señalización) teniendo que recorrer unos dos kilómetos para poder cruzar una carretera cuyo tránsito es de vital importancia para los vecinos de la zona".

La norma especifica que en este tipo de vías solo se autoriza el paso de tractores dedicados a la ganadería o de animales a pie acompañados de personas en caso de existir una línea discontinua. Si la raya es continua, queda terminantemente prohibido. "La mayoría de los vecinos de esta zonas se dedican a la ganadería o actividades similares y el cruce de sus vehículos por esta carretera resulta fundamental para no alterar profundamente su actividad", apunta Fernández.

En el caso del paso de peatones, y en caso de no existir un paso habilitado para su cruce, la ley permite que éstos puedan cruzar una vía como esta tanto en línea continua como en discontinua. Sin embargo, Balbino Fernández entiende que "también es necesario dotar a este tramo de pasos de peatones, pues para cruzar con seguridad deben caminar otros dos kilómetros y hacerlo a través de un puente".

El Partido Popular de Porriño ya presentado una moción para tratar las demandas de estos vecinos en el próximo pleno municipal porque entienden que les provoca "problemas de movilidad y accesbilidad al no poder cruzar la carretera".