Los padres de Iván Durán, el joven de 30 años desaparecido el 25 de agosto en Baiona, han aportado al juzgado y a la Guardia Civil un informe médico en el que se apunta a la posibilidad de que el chico sufriera un brote psicótico para apoyar su petición de que el caso sea declarado de alto riesgo, con el fin de que se incrementen los medios humanos y materiales. Se trata de un informe del psiquiatra que lo atendió cuando tenía 12 años, en el que se reporta un cuadro depresivo y antecedentes familiares de esquizofrenia.