La comisaría de Tui, situada al lado del Concello, en realidad Unidad de extranjería y Documentación, poseía unas condiciones pésimas para el trabajo hace tan solo cinco años. Humedades, goteras, barreras para discapacitados, baños construidos en los sesenta del siglo pasado deteriorados... Pero sufrió una transformación positiva desde la llegada del jefe Francisco Cruz, actual responsable de la unidad.

Cruz, un veterano del cuerpo y tudense, llegó a este destino en su ciudad hace tres años y medio, y puso en marcha distintas reformas como la construcción de un nuevo tejado para evitar goteras y humedades, construcción de baños acordes con los tiempos actuales, trabajos de pintado, aire acondicionado, un ascensor para discapacitados... Y mejoras para el servicio como un circuito cerrado con cámaras de vigilancia en zonas exteriores y un nuevo coche.

Entre las obras pendientes de esta comisaría estaría la rampa de acceso para minusválidos, con permiso de Patrimonio pero sin autorización del Concello pese a ser un edificio público local. Nada que ver con el calamitoso estado del CCPA.