El Concello de Arbo ha decidido poner freno al deterioro de la casa consistorial por la entrada de agua en el edificio.

Urge reparar la cubierta del edificio para impedir que las filtraciones de agua que presenta sigan dañando los muebles y enseres que contiene y sus propias paredes con humedades. El alcalde arbense, Horacio Gil, explica que "decidimos intervenir para frenar el problema" porque las humedades fueron apareciendo "en distintos puntos y dependencias del edificio" afectando ya a "mobiliario y a enseres municipales, además de a las paredes y suelos del inmueble".

El agua entraba en el edificio al parecer por fallos de funcionamiento en la red de evacuación de aguas de la cubierta del edificio a través del canelón. Por este motivo, los trabajos consisten en actuar en toda la red de evacuación de las aguas pluviales de la cubierta, y también en sanear todos los daños ocasionados por la entrada del agua. Además se aprovechará para renovar la red informática.

Aprovechando la intervención se realizará un cambio en el diseño de la cubierta del edificio para "que sea más eficaz" que la existente hasta ahora.

El proyecto conlleva una inversión de 50.000 euros, de los que 40.000 proceden de una subvención de la Xunta para infraestructuras de uso público. Los 10.000 euros restantes los aporta el Concello de Arbo.

Depuradora

Por otro lado, el Concello de Arbo también está ejecutando en estos momentos obras de saneamiento con cargo a la línea no competitiva del Fondo de Compensación Ambiental de la Consellería de Presidencia de la Xunta.

La pretensión es poner en funcionamiento la depuradora de Fonte María que da servicio a parte del casco urbano de Arbo y, para ello, antes, los operarios deben ejecutar labores de desbroce y limpiezas en su perímetro exterior y también en el interior de la infraestructura, así como la retirada de los elementos deteriorados y obsoletos.

"Estamos retirando los residuos a través de un gestor autorizado, para poder a extraer los lodos de su interior" explica el alcalde de Arbo.

Posteriormente, se repararán los depósitos de la depuradora, realizando un saneamiento de las fisuras de sus paredes para garantizar que no existan fugas. Asimismo, se cambiarán las tuberías que realizan la inyección de aire en el fondo del depósito principal por unas de acero inoxidable. La subvención recibida en este caso ha sido ligeramente superior a los 35.000 euros.

Además, Arbo contó con otra ayuda de 15.453 euros, procedente de la línea competitiva del Fondo de Compensación Ambiental, que le permitió afrontar gastos derivados de la recogida de residuos sólidos urbanos.