El Concello de A Cañiza está acometiendo la ampliación y mejora de la instalación térmica de la piscina municipal climatizada, colocando bombas de calor que ofrecen una mayor eficiencia en la generación de calor a partir del empleo de la energía eléctrica. "Así conseguimos reducir el gasóleo con la implantación de un sistema de calefacción mediante energía geotérmica en circuito cerrado, con la consecuente reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera", explicaba el jefe territorial de Presidencia en Pontevedra, Ramón Pereiro, mientras visitaba ayer, junto con el alcalde Miguel Domínguez, el lugar de los trabajos para comprobar su evolución.

El proyecto puesto en marcha permite la aplicación de un sistema de generación de calor más eficiente, mejorando la eficiencia de la instalación y reduciendo el impacto medioambiental de las emisiones generadas, así como optimizar la explotación de la misma con la reducción del coste de mantenimiento. "La obra, que estará rematada a finales de septiembre, supondrá un ahorro anual del 53% en el consumo de energía y, lo que es más importante, reducirá la emisión de CO2 hasta en un 83%", señala el regidor local.

El proyecto alcanza una inversión total de 87.500 euros, aportados íntegramente por la Xunta de Galicia a través de una línea de ayudas del Fondo de Compensación Ambiental. Para este fin el Ejecutivo Autonómico destina más de 1,1 millones de euros a los municipios de la provincia de Pontevedra, dirigidos a desarrollar proyectos relacionados con la recuperación medioambiental del territorio, no solo mediante la eficiencia energética, como es este el caso, sino también en otros ámbitos como la mejora del saneamiento y depuración de aguas residuales, abastecimiento de los suministros de agua potable, recuperación de espacios naturales o dotación de medios materiales y humanos para la conservación ambiental.

Reubicación de áreas

La visita de Pereiro sirvió también para comprobar otra actuación enmarcada en la Orden de Infraestructuras de Uso Público. Según explica el alcalde, se está llevando a cabo el acondicionamiento de un local en la planta baja de la Casa Consistorial para albergar el Departamento de Servicios Sociales.

"El sitio ocupado hasta el momento tenía unas limitaciones de espacio muy grandes y se hacía demasiado pequeño para el desarrollo de las labores diarias de los cuatro trabajadores que actualmente están en dicha área". De esta manera, los Servicios Sociales se trasladan a lo que antiguamente era la cárcel y en los últimos años albergó la biblioteca. Ahora, "se ordenará y aprovechará el espacio, manteniendo en una parte el banco de alimentos y en otra este departamento". Los trabajos a acometer en este caso, que también estarán rematados el próximo mes y que suponen una inversión de 50.000 euros, la instalación de un suelo nuevo y la realización de un drenaje para evitar los problemas existentes de humedad, así como la construcción de tabiques para hacer las correspondientes divisiones del espacio.

Por otra parte, en el local que hasta el momento ocupan los Servicios Sociales se instalarán las dependencias de la Policía Local, que actualmente ocupan un local muy pequeño y sin acceso directo al exterior.