Setenta y dos plazas de aparcamiento y doble sentido de circulación. Así proyecta el gobierno local nigranés la futura rúa Mariñeiro de Panxón, que será objeto en los próximos meses de una obra de urbanización en la que el Concello ha previsto invertir 240.900,35 euros. "Queremos consolidar definitivamente el doble sentido", asegura el alcalde, Juan González, que prevé que la reforma zanje la polémica surgida el pasado mandato tras la decisión del ejecutivo municipal -entonces del PP- de eliminar uno de los sentidos para ganar plazas de parking.

Con aquella remodelación, contestada por todas las fuerzas de la oposición y que despertó críticas entre los vecinos de la zona, se consiguieron habilitar 43 nuevas plazas de aparcamiento, una cifra que el actual gobierno pretende incrementar ahora sin renunciar a mantener el tráfico sin cambios.

Los trabajos, que el Ayuntamiento financiará con cargo al remanente de Tesorería, incluirán la reparación del pavimento, la ampliación de las aceras, la renovación de la red de pluviales y la instalación de nuevas luminarias de tecnología led. Una vez contratadas las obras, pendientes de licitación, estas tendrán un plazo de ejecución de tres meses.

"Se trata del acceso principal a la parroquia y hasta ahora ha estado desatendido", apunta el alcalde, para quien el proyecto, que tiene como objetivo facilitar el tránsito de vehículos por la zona sin renunciar al estacionamiento, "supondrá una mejora en la seguridad vial y del entorno".

La calle, que ya recuperó el verano pasado el doble sentido, cuenta en la actualidad con aceras, aunque son "estrechas" e "incumplen la normativa de accesibilidad", informa el gobierno local, que contempla ampliar el ancho de 1,50 a 1,80 metros.

El proyecto previsto mejorará asimismo la actual red de evacuación de aguas pluviales, en la que se producen problemas de estancamiento los días de fuertes lluvias.

Una de las cuestiones que más interesa al gobierno de esta reforma, además de garantizar el aparcamiento sin renunciar al doble sentido, es la sustitución de las farolas convencionales por nuevas luminarias led, que supondrán un importante ahorro energético y "menor contaminación lumínica sin perjudicar la seguridad del viandante".

El ejecutivo municipal ha querido también dar importancia al diseño de los nuevos báculos luminosos, que plantean como un "elemento característico y diferenciador". Según avanzó ayer el gobierno, el fuste será de acero inoxidable con acabado brillante ornamentado con el nombre de la calle y el escudo de Nigrán.

La reforma abarca el tramo de calle entre el cruce con la carretera por la vía (PO-325) y la rotonda de la iglesia. El Concello, sin embargo, ya ha puesto en marcha el proceso para contratar la humanización pendiente en la calle hasta el puerto pesquero. "La idea es que antes de que finalice el mandato esté completada la humanización en Mariñeiro, desde su acceso hasta la zona portuaria", afirma el regidor nigranés.