El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) le ha dado la razón a la empresa Central Eléctrica Sestelo en su reclamación contra el Concello de Ponteareas por la deuda generada entre los años 2007 y 2009 correspondiente al consumo eléctrico de alumbrado público y diversas instalaciones municipales.

La sentencia dictada responde a un recurso presentado por la compañía eléctrica contra la decisión del anterior gobierno del PP de dejar sin pagar facturas que suman un total de 1.326.177 euros. De 2007 son 328.061 euros, de 2008 596.533 euros y de 401.582 euros del 2009.

El TSXG confirmó la sentencia y le dio la razón a la empresa demandante por no tener pagado el Concello las facturas y por lo tanto toda la deuda que no prescribiera en el momento del plan de pago a proveedores en abril de 2012, "plan en el que el anterior gobierno de Salvador González rechazó incluir estas deudas para su pago, provocando la demanda judicial de la empresa", aseguran desde el Concello. El alcalde, Xosé Represas, subrayó que "en este primer año al frente del Concello nos hemos visto obligados al pago de más de 3 millones de euros de deudas pendientes del anterior ejecutivo del PP y ahora, como era previsible, aun debemos pagar estas facturas de energía eléctrica, que se vienen a sumar a otras muchas deudas que el anterior gobierno dejó sin pagar y que suponen una dificultad añadida para llevar a cabo nuevas políticas de cambio y para favorecer la creación de empleo." Con todo, el alcalde asegura que ahora, una de las prioridades es abordar la aplicación de esta nueva condena, "buscando la fórmula más ventajosa para los intereses municipales y para evitar más retrasos o incumplimientos en los pagos para que la deuda no siga incrementándose".

Falta de inversiones

Un año después del cambio de ejecutivo, el actual gobierno local asegura que sigue enfrentándose a "nuevas sorpresas, a nuevas condenas originadas por la irresponsabilidad del anterior gobierno que han afectado negativamente a los intereses generales de Ponteareas".

Ante esta situación, el gobierno actual echa la culpa al PP de no poder ahora hacer nuevas inversiones. "Estamos realizando una gestión ajustada del gasto del Concello para atender todos los servicios básicos y las medidas de bienestar social", explicó Represas. "Nuestra obligación es mantener y mejorar los servicios que ofrece el Concello aunque, de momento, no tengamos posibilidad de hacer nuevas inversiones con los recursos municipales".

El alcalde asegura que "estas decisiones de gastar sin control y no ser capaces de atender ni al gasto corriente, provocaron una situación económica insostenible con el Concello en la bancarrota, dando mala imagen de Ponteareas con reclamaciones continuas y deudas olvidadas incluso de 1998".

"Al hilo de estas condenas es oportuna una reflexión de todos para que nunca más se consientan gobiernos corruptos que gestionan y gastan sin control", concluyó el alcalde.