El número de animales abandonados y extraviados durante la época estival aumenta debido a los fuegos artificiales que se lanzan durante las fiestas patronales en las diferentes aldeas, según denuncia la directiva de la protectora de animales porriñesa. "Las mascotas se asustan con el fuerte sonido de los cohetes y huyen atemorizadas por lo que muchísimas acaban perdiéndose desorientadas", comenta un miembro de la protectora. Desde el colectivo reclaman por ello una regulación de las franjas horarias para el lanzamiento de fuegos artificiales para que los dueños puedan atender a sus animales y evitar que se escapen durante las tiradas.

En este sentido, también aconseja a los dueños de las mascotas la instalación de chips a sus animales para poder facilitar la devolución de los perros extraviados, así como la solicitud de ayuda a las protectoras si no disponen de los recursos necesarios para mantenerlos. "Si alguien tiene serias dificultades para mantener a su mascota nosotros, tras la valoración del caso, podemos ayudarles con la donación de pienso por ejemplo u otro apoyo que fuese necesario", comentan desde la directiva.

La protectora de Porriño, constituida en el año 2002 por un grupo de personas que querían solventar las carencias existentes en cuanto a atención y servicios a los animales abandonados, funciona con una veintena de voluntarios que trabajan en el municipio como intermediarios entre particulares que encuentran a mascotas abandonadas y casas de acogida para su adopción.

En la actualidad albergan en sus instalaciones a una decena de perros, ya que el terreno en el que se encuentran va a ser puesto a la venta por el propietario, por lo que la junta directiva de la protectora precisa otra parcela para poder acoger a más animales. De ahí la importancia de las casas de acogida, en las cuales tienen ubicados a día de hoy a unos 40 animales.

A través de ayudas desinteresadas materializadas con donaciones de pienso, transporte o servicios de limpieza y un puesto en mercadillos, la asociación trabaja para reducir los canes callejeros y buscarles un nuevo hogar con la ayuda de las redes sociales. "La venta de animales debería estar prohibida ya que todas las perreras y protectoras estamos llenísimas de mascotas que necesitan un nuevo hogar y son igual de adorables que los que se exponen para la venta", comenta un miembro de la directiva.

Servicio de recogida

Por su parte, el Concello de Porriño cuenta con un servicio de recogida de animales concedido a una empresa por licitación pública y que, regida por una normativa de la Xunta de Galicia, devuelve los animales a sus propietarios o los entrega en adopción, según informa el responsable.

No obstante, desde la protectora echan en falta un registro de esos animales recogidos, al igual que también desconocen el protocolo que siguen.