El servicio de recogida de basura de Gondomar quedará por fin regularizado el próximo año. Así lo asegura el alcalde, Francisco Ferreira, que ya dispone del pliego de cláusulas para sacarlo a concurso después del verano. Las bases de la licitación plantean un contrato de cuatro años, prorrogables otros dos, por un importe de 774.950 euros anuales. Una cantidad que supondrá un ahorro de unos 300.000 euros al año respecto a los costes actuales, según asegura el regidor, que cifra el gasto en algo más de un millón por ejercicio.

A los 800.000 euros que recibe cada año Geseco, la actual concesionaria, hay que sumar, explica Ferreira, la gestión del punto limpio, que cuesta al Ayuntamiento otros 120.000 euros al año, y parte de la limpieza viaria, que realizan los operarios municipales en numerosas zonas, además de la reposición de contenedores, actualmente a cargo del Ayuntamiento. El precio del futuro contrato incluye todas estas tareas entre las funciones de la futura adjudicataria.

La Corporación dispone de copias del pliego de condiciones desde hace unos días. El alcalde ha convocado a todos los ediles este viernes a las 12.30 horas. Acudirán al encuentro representantes de la empresa que lo ha redactado -la firma Into Consulting, ubicada en Nigrán- con el fin de resolver sus dudas.

A partir de ahí se abrirá un debate para consensuar el documento. Ferreira espera aprobarlo en el pleno previsto en el mes de julio. Si sale adelante, arrancará la exposición pública y el concurso podrá convocarse en octubre, de manera que la futura concesionaria podrá entrar en funcionamiento el 1 de enero de 2017.

Gondomar pondrá fin así a un año y medio de servicio al margen de la ley. Y es que Geseco finalizó su concesión de diez años en noviembre de 2014 tras varias prórrogas. Desde entonces, factura los trabajos mensualmente al Ayuntamiento. El Concello le abona 73.000 euros cada mes -y algún recibo extra por gastos a mayores- , pese a los reparos del departamento de Intervención por carecer precisamente de contrato y tratarse de un servicio continuado que así lo requiere.

"Non podemos seguir nesta situación. Necesitamos un contrato con garantías de legalidade e un servizo adaptado ás necesidades dos veciños de Gondomar. O actual está desfasado. Hai que replantexar as rutas e a ubicación dos colectores", argumenta Ferreira.

El futuro contrato establece la sustitución de todos los contenedores por otros nuevos, el uso de maquinaria renovada -de 4 de antigüedad como máximo-. Exige además la subrogación de los siete trabajadores existentes en la plantilla y la incorporación de uno más para ampliar la limpieza de vías públicas.