Un motorista fue cazado en la A-55 en Mos circulando a más del doble de la velocidad permitida, en un vial que entre Porriño y Vigo posee una condiciones nefastas para la circulación manteniendo severas restricciones de velocidad para evitar accidentes.

En este caso, la Guardia Civil comunicó al propietario de una motocicleta la calificación de investigado (imputado) en un supuesto delito de contra la seguridad vial por pasar a 183 kilómetros por hora en un tramo limitado a un máximo de 80.

Según explicó ayer la benemérita, en el marco de la campaña de control sobre excesos de velocidad que está desarrollando la DGT, el pasado lunes, día 18, "un equipo del subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra, con base en el Destacamento de Porriño, detectó una motocicleta circulando por la autovía A-55 cuya velocidad duplicaba la permitida en dicha vía".

La detección se efectuó en el punto kilométrico 10,300, lugar de Tameiga-Mos, donde el tramo está limitado a 80 y la motocicleta, marca Yamaha, circulaba a 183 km/hora, según los datos del radar, al parecer camuflado en el interior de un coche.

Al no ser el conductor parado "in situ", por el equipo GIAT de este subsector de Tráfico, se iniciaron las correspondientes gestiones que dieron resultado positivo en el día de ayer con su localización y notificación de su condición de investigado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.

Informa la Guardia Civil, que las diligencias instruidas serán entregadas en el Juzgado de Instrucción número 3 de Porriño, donde deberá presentarse el piloto el próximo martes, día 26, a las 09.00 horas.

Presencia de radares

El tramo de autovía A-55 entre Tameiga y Puxeiros se ha convertido en uno de los de mayor recaudación para la Guardia Civil tanto en sentido Vigo como en sentido Porriño debido a los numerosos radares fijos que se han instalado y a la presencia constante de coches de la Guardia Civil con radares camuflados.

La A-55 esta limitada en Mos a 80 kilómetros por hora, si bien, en algunos puntos incluso esta rebajado a 60, produciéndose una "caza" continua de conductores.