La empresa encargada de las obras de ampliación de la autopista AP-9 entre Rande y Teis se comprometió a reabrir en el plazo de una semana la Subida Mouriño, que lleva dos meses cerrado tanto al tráfico rodado como a los peatones debido a la caída de un talud de veinte metros de altura en uno de los laterales de la autopista en Chapela. Esta situación mantiene casi incomunicados a decenas de residentes del barrio de Cidadelle, en la zona alta de la parroquia, que se ven obligados a dar un rodeo de más de un kilómetro a través de un laberinto de estrechos viales para llegar a sus casas, como denunciaron a través de la asociación de vecinos.

El concejal de Interior y Tráfico, Arturo González, señaló ayer a través de la Radio Municipal que el camino volverá a estar operativo en una semana, si el tiempo lo permite, una vez rematen los trabajos de asfaltado y acondicionamiento del vial. Además pidió disculpas a los vecinos por las molestias que causa el cierre viario, aunque indica que se trabaja en la zona para garantizar la seguridad al cien por cien.

Asimismo señaló que desde el primer momento la empresa está volcada en el camino y realizando al mismo tiempo obras complementarias para evitar nuevos desprendimientos en esta zona con un elevado desnivel para evitar cualquier situación de peligro tanto para los vecinos como los usuarios de la autopista.