Tan solo dos ofertas concurren a los seis puestos vacantes de la plaza de abastos de Baiona. El cuarto concurso público convocado por el Concello para cubrir los locales todavía vacíos no logrará los objetivos una vez más. Se ofrecían cuatro pescaderías, una floristería y una tienda de delicatessen en concesiones de veinte años. Tras cerrarse el plazo de presentación de propuestas el pasado día 2, se habían registrado únicamente una para ocupar una de las bancadas de venta de pescado y marisco y otra para explotar el negocio de productos gourmet.

Tras solicitar el Ayuntamiento la documentación correspondiente a los dos aspirantes, la mesa de contratación decidirá si cumplen los requisitos para empezar a funcionar en breve. En caso de que todo esté correcto, quedarían todavía cuatro locales vacíos del total de catorce.

Los reducidos precios de explotación y las facilidades de pago que ofrece el Concello no acaban de calar entre los emprendedores. Los espacios pueden adquirirse por cantidades que oscilan entre los 15.000 y los 20.000 euros, que pueden abonarse de una vez o por anualidades de entre 750 y 1.000 euros.

Pero el gobierno municipal no se da por vencido para alcanzar la ocupación total del espacio comercial que remodeló hace tres años para convertirlo en un centro de convivencia vecinal moderno y abierto a las actividades culturales y de promoción de los productos frescos y la gastronomía. Así lo asegura la concejala de responsable del área de Mercados, Ana Simons, que no descarta una quinta licitación de puestos para lograr el lleno.