La Senda da Auga, una de las rutas de senderismo más concurridas de Redondela, será objeto durante los próximos días de diversas actuaciones para reparar los daños causados por los temporales del pasado mes de febrero, donde las fuertes lluvias causaron numerosos socavones en varios puntos. Estas zanjas provocadas por las aguas pluviales suponen un peligro sobre todo para los numerosos ciclistas que transitan cada fin de semana por este corredor verde, que a lo largo de 23 kilómetros atraviesa nueve parroquias del municipio.

El concejal de Medio Ambiente, Miguel Ángel Álvarez Ballesteros, explicó ayer que en los últimos días ha recorrido el trazado de la senda desde la parroquia de Reboreda hasta Chapela para evaluar la situación y examinar todos los desperfectos originados por el arrastre de las aguas a lo largo de todo el invierno, una situación que se agravó sobre todo con las lluvias de hace un mes.

El edil confirma que en cuanto mejore el tiempo se realizarán diferentes actuaciones en el trazado para tapar los baches, canalizar las aguas, reponer barandilla y carteles, además de proceder a la limpieza de la vegetación en las márgenes de la senda. "A lo largo del trazado se produjeron múltiples corrimientos de tierra así como surcos profundos ocasionados por el paso del agua que cruzaba el camino por muchos de sus puntos", señala.

Hace dos años el Concello de Redondela invirtió 20.000 euros en la mejora del firme de la Senda da Auga, en la que también se habilitaron puntos de descanso con bancos de piedra a lo largo del trazado.

Por otra parte, el responsable de Medio Ambiente hace un llamamiento a la ciudadanía para que colaboren con el mantenimiento de una senda limpia y agradable. "Es responsabilidad de todos no tirar la basura y abandonar escombros en esta zona, ya que existen contenedores de recogida de residuos sólidos urbanos en los distintos cruces del recorrido", indica.

El Concello decidió hace unos años retirar las papeleras de todo el trazado, una decisión que justificó porque entendían que en este trazado natural no debía existir este tipo de mobiliario. "Todo lo que se lleva al monte se puede traer de vuelta, en cuanto a envases, latas, botellas, plásticos, papeles y demás objetos", puntualiza. En este sentido, aunque considera que la inmensa mayoría de personas cuida y protege este espacio, "es triste comprobar como unos pocos echan por tierra todo el trabajo y el esfuerzo realizado", lamenta el edil.

Este corredor verde fue inaugurado como ruta de senderismo hace siete años por iniciativa de la Mancomunidade de Montes Veciñais de Redondela, con la colaboración del programa Proder II en la financiación.