El avance de las obras en la AP-9 a su paso por Chapela continúa generando incertidumbres entre los vecinos. La Asociación de Afectados alerta de las consecuencias de la modificación del trazado de la autopista en los límites legales de afección, que se extienden de los 8 metros de dominio exclusivo a los 25 de servidumbre y los 100 metros de afección, según la Ley de Carreteras. Esto significa que las propiedades en estas áreas -454 viviendas según el colectivo vecinal- deben afrontar consecuencias.

"Ya con el trazado que tenía la autopista antes, ha habido casos de multas por obras realizadas en casas particulares, algunas de hasta 3.000 euros", asegura el portavoz de la Asociación de Afectados, Francisco Puch. Al menos dos casos acabaron en los tribunales y salieron favorables a los vecinos, pero "la incertidumbre sigue ahí". El problema estriba en la consideración que se dé a Chapela según las diferentes normativas aplicables.

Así, según la concesionaria Audasa el tramo de la autopista que atraviesa Chapela sería "urbano", por lo que las competencias atañen al Concello. Por ello es necesario aclarar los límites aplicables en el futuro Plan Xeral de Urbanismo (PXOM) en fase de redacción.

La Asociación de Afectados expuso el jueves a un grupo de vecinos los planos con las nuevas líneas de afección. También lo hará el próximo jueves en el Multiusos de Chapela, para aclarar dudas jurídicas.