El puerto pesquero baionés ganará en seguridad vial y en armonía el próximo año. La Xunta pondrá en marcha después del verano un proyecto de reordenación que incluye un espacio ajardinado y una rotonda en el acceso. Así lo anunció ayer la conselleira de Infraestructuras e Vivenda, Ethel Vázquez, tras una reunión con el alcalde, Ángel Rodal, la concejala de Urbanismo, Ana Simons, y el edil de Vías y Obras, José Ángel Bahamonde. Se trata del primer paso para avanzar en la idea de "abrir Baiona al mar" que el regidor se plantea desde que tomó posesión del cargo en octubre y que prevé intervenciones posteriores como la remodelación del paseo Pinzón o la dotación de un área recreativa en A Ladeira.

Las obras del muelle se ejecutarán en aproximadamente cinco meses tras la temporada estival con el fin de evitar mayores inconvenientes al denso tráfico de esos meses en la villa y para no entorpecer el paso de la Vuelta Ciclista a España, previsto el 21 de agosto. Por el momento, el Ayuntamiento trabaja en la redacción del proyecto, que colocará una glorieta de 28 metros de diámetro en la calzada, entre Elduayen y Alférez Barreiro, para despejar el tráfico tanto en el acceso al muelle como en la salida, especialmente complicada para los conductores que abandonan la zona en dirección a Vigo.

Mirador con bancos

El jardín, que incluirá bancos y papeleras, ocupará parte del frente urbano del puerto e incluirá un mirador de unos 500 metros cuadrados que permitirá contemplar la fortaleza de Monterreal y la bahía sin apenas obstáculos.

Desaparecerá así la hilera de contenedores que actúa como barrera visual en un lateral orientado hacia A Ribeira y quedarán reordenadas las plazas de aparcamiento y la parada de taxis. El regidor garantizó que los taxistas continuarán su actividad allí mismo y que los estacionamientos no se verán reducidos. En caso de que la rotonda y la zona verde obliguen a ocupar parte de ellos, serán reubicados a otra zona de la localidad.

Pero antes de los trabajos en el puerto, la Xunta llevará a cabo el refuerzo del firme en toda la travesía costera baionesa. Pavimentará tres kilómetros desde la calle Areas en dirección a Baredo. La licitación del proyecto está prevista en abril por cerca de 340.000 euros, según indicó Ethel Vázquez.

Inicialmente, la consellería había pervisto desplegar las obras a lo largo de 2 kilómetros, hasta la rotonda del paseo Pinzón. Pero ampliará la actuación atendiendo a las demandas de Rodal para resolver deficiencias de la calzada a lo largo de mil metros más.