El alcalde de Gondomar, Paco Ferreira, advirtió ayer de que las instalaciones de la Fundación Centro Galego de Artesanía tendrán que ser reubicadas por su "falta de seguridade" al emplear materiales químicos y eléctricos en un espacio municipal, en el que ocupa 300 metros cuadrados, mientras diversos colectivos locales carecen de dependencias.

El regidor recordó que es el Concello quien asume los gastos de suministros del centro sin conocer "que se fai ou se se cobra polos cursos" y criticó a la Xunta por no invitarlo a una visita de la directora xeral de Comercio a un curso de patronaje.