El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil imputó a un vecino de Porriño, cuya identidad no ha sido facilitada, por tenencia ilícita de animales en su propiedad así como carecer de licencia de animales potencialmente peligrosos y condiciones de alojamiento, salubridad y seguridad, de algunos de ellos.

El vecino, residente en Atios, tenía en su casa, entre otras especies, dos serpientes pitón -una de 3,20 metros y otra de 2,20 metros- y dos caimanes -de 1,47 metros y 60 cm de largo- así como otros animales exóticos de los que no pudo determinar la procedencia.

Según explicó la Guardia Civil, la patrulla del Seprona de Porriño incautó, el pasado martes, a estos animales localizados en el interior de un invernadero anexo a una vivienda, por carecer de documentación y de las preceptivas condiciones de salubridad, higiene y seguridad. Las especies quedaron todavía en el lugar, en depósito, hasta ser recogidos por la Xunta de Galicia.

Los hechos suceden cuando la patrulla del Seprona tiene conocimiento de dos perros de raza peligrosa (pitbull terrier) que se encontraban en el patio de una casa en Atios. Al proceder a la inspección del local donde habitaban estos perros se observaron que había también varios animales exóticos como: tortugas de agua, ánades reales y dos especímenes de caimán.

Por todo ello se concierta una cita de inspección con el propietario de la vivienda y así en la mañana del miércoles acompañados por un veterinario de la Xunta de Galicia (Consellería de Medio Ambiente) y con el consentimiento del mismo se comprueba la existencia de otros especímenes, a mayores a los citados, entre ellos, en el interior del garaje de la vivienda, un terrario con dos serpientes Pitón, también tres dragones barbudos, dos tortugas de tierra, así como roedores (ratones y ratas para alimento de los reptiles).

Ante las irregularidades observadas, entre otras carecer de declaración de núcleo zoológico, se procedió a la incautación de las dos Pitones, los dos caimanes, las cuatro Ánades reales, dos tortugas de tierras, tres tortugas de aguas y tres dragones barbudos.

Además de la incautación, se instruyó un informe-denuncia de las irregularidades observadas que será remitido a la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia (Conservación de la Naturaleza) y la Administración de Aduanas.