El gobierno local de Soutomaior llevará mañana a pleno la aprobación del Plan Xeral de Ordenación Urbana (PXOM) con el objetivo de sacar adelante el documento urbanístico antes de la entrada en vigor de la nueva Lei do Solo. La mayoría absoluta con la que gobierna el PP -siete concejales frente a los cinco del BNG y uno del PSOE- será suficiente para aprobar el planeamiento, a pesar de las críticas de la oposición que le reprocha la falta de consenso y el perjuicio que causará a más de 300 vecinos.

El portavoz municipal del BNG, Manu Lourenzo, acusa a los responsables municipales de "falta de seriedad" y de "engañar a los vecinos al saltarse el proceso de avance y participación en la elaboración del PXOM", ya que considera que desde la aprobación inicial, en noviembre de 2014, se han realizado cambios relevantes que los ciudadanos desconocen y para los que sería necesario un nuevo periodo de exposición pública.

"Hay cientos de vecinos que están afectados, o bien porque sus alegaciones fueron desestimadas o bien porque las importantísimas modificaciones introducidas tienen nuevas consecuencias que los ciudadanos desconocen. El hecho de que Agustín Reguera pretenda aprobar este plan sin que los vecinos sepan nada supone una agresión sin precedentes", afirma Lourenzo, que exigirá en el pleno una nueva exposición pública del documento.

La aprobación inicial del PXOM hace dos años suscitó un total de 527 alegaciones de las que, según el gobierno local, se resolvieron a favor el 53 por ciento. Los nacionalistas, sin embargo, cuestionan estas cifras y aseguran que solo el 30% de los escritos fueron aprobados, mientras que otro 20% fueron parcialmente aceptadas. "Esto supone que en muchos casos no se resolviera el problema y casi un 50% fueran desestimadas. Estamos hablando de que existen más de 300 alegaciones y familias afectadas que, debido a los cambios introducidos, tienen sus parcelas afectadas y no lo saben", puntualiza.

Para Lourenzo resulta incomprensible que el gobierno popular pretenda aprobar "por la puerta de atrás" este documento que marcará el desarrollo urbanístico del municipio durante la próxima década. "Si el PP hace esto los vecinos estarán en la más absoluta indefensión y muchos verán como se devalúan sus terrenos para siempre. Si Agustín Reguera no hizo los deberes en veinte años es su responsabilidad y los vecinos no tienen por qué pagar su incompetencia".

El portavoz del BNG también criticó que el Partido Popular pretenda aprobar este documento "contra la mayoría de los vecinos", una afirmación que justifica con los votos de las últimas elecciones municipales, en los que el PP obtuvo 1.961 apoyos (el 49%), frente a los 1.987 logrados por el BNG y PSOE. "Hubo más vecinos que votaron a los grupos de la oposición que al PP y si los populares imponen este Plan Xeral estarán atacando a la mayoría de los vecinos. Los planes de urbanismo deben ser documentos que tengan un amplio consenso, que sean debatidos con los ciudadanos y que estén pensados para ordenar verdaderamente el territorio. En el caso de Soutomaior todos conocemos las consecuencias que nos trajo el caos urbanístico del Partido Popular en los últimos quince años", concluye.