Una vecina de Covelo de 83 años de edad, Josefa Araujo Fernández, fue hallada muerta anoche en su casa después de que unas vecinas alertaran de que no sabían nada de ella.

Esta vecina, del barrio de A Hermida, perdió a su marido tan solo hace unos días y vivía sola.

Ayer por la tarde, varias vecinas se extrañaron de que no saliese fuera de casa y no respondiese a sus llamadas, a pesar de ver luz en el interior, por esa razón avisaron a la Guardia Civil.

Alrededor de las 19:30 horas, tras saltar la verja, los agentes y una de las vecinas vieron por una ventana que la octogenaria se encontraba en el suelo, muy cerca de la puerta de casa. Tras tener conocimiento de esto forzaron la puerta y comprobaron que la mujer se encontraba fallecida en el suelo pero la puerta de casa estaba cerrada por dentro.

Además se dio aviso a los bomberos de Ponteareas que se trasladaron al lugar por si hubiera que abrir más puertas.

Se cree que se trata de un fallecimiento natural, pero la Guardia Civil investiga el hecho.