El ataque de un "hacker" informático la pasada semana ha dejado a la cofradía de pescadores redondelana sin su archivo de los últimos tres meses. Según explicó el patrón mayor, alguien accedió a través de internet -los informáticos creen que pudo ser desde Rusia- y borró los discos duros de los ordenadores en los que se almacenaban los datos de facturación, nóminas de los trabajadores y pagos a proveedores, entre otros.

La pérdida de los datos ha supuesto un importante contratiempo para la administración del pósito, aunque de la mayor parte de ellos conservaban copia en papel. Ahora trabajan en volver a digitalizarlos, una tediosa labor que les ocupará varios días.