Es posible participar en la excavación del castro de Chavella cómodamente desde casa por una módica cantidad. Hacerlo de forma presencial resulta más caro, pero también "mucho más apasionante". Así lo creen los mecenas que han compartido la última semana con los profesionales gallegos a pie de yacimiento para ampliar sus conocimientos en la materia a cambio de 920 euros cada uno.

Ayer se despidieron de Oia después de unas "auténticas vacaciones de aventura", como señalaba Layla Taylor, una militar americana retirada y residente en Suíza que viajó al municipio como alumna y espera regresar el próximo año como turista.

Impresionado por "la cantidad de castros y petroglifos por metro cuadrado" de la zona se marcha Jules Hynam, otro de los "becarios inversores", un vendedor de productos culturales británico "sorprendido" por la relación de los lugareños con su patrimonio.

Y es que la implicación de los vecinos de Oia con la excavación "es todo un ejemplo", recalca Lisa Westcott Wilkins, directora de Digventures, la empresa que fundó con su marido en 2011. En solo cuatro años han promovido una docena de intervenciones en varios países con inversiones públicas y privadas que suman 700.000 euros.

La cantidad de llamadas que reciben para colaborar con iniciativas en todo el mundo les obliga a "seleccionar mucho" los proyectos. La experiencia en Oia ha sido "muy buena", indica. Tanto, que no descarta repetirla.

Para Costa dos Castros también ha resultado un intercambio "moi enriquecedor", destaca su coordinador, Xosé Gago, entusiasmado con la dimensión internacional que adquiere el proyecto.