La estación principal de Redondela, que da servicio a la línea ferroviaria del Eje Atlántico, se mantendrá sin personal de atención al público. Así lo reconoce el Ministerio de Fomento en respuesta a una iniciativa parlamentaria del BNG, por lo que se deja esta infraestructura en la que se invirtieron 7 millones de euros con un papel secundario dentro de la línea de comunicación ferroviaria.

La falta de personal impide a los usuarios adquirir sus billetes en las taquillas, por lo que los viajeros están obligados a comprarlos en una máquina automática situada en el vestíbulo o a través de internet.

El concejal nacionalista Xoán Carlos González critica la "total falta de compromiso" con Redondela por parte de la administración responsable de la red ferroviaria, ya que considera que la inversión realizada para la construcción de la estación de Os Eidos "debe asegurar que Redondela siga siendo un referente en las comunicaciones ferroviarias, como siempre fue", afirma.

El alcalde redondelano, Javier Bas, tampoco escondía ayer su decepción con la confirmación de Fomento de no dotar de personal a la nueva estación del tren. "Hemos trasladado al ministerio las demandas porque consideramos que Redondela debe ser uno de los puntos de referencia del Eje Atlántico, y para ello además de dotar a la estación de personal también demandamos una mayor frecuencia de paradas. Tengo que reconocer que la respuesta de Fomento no es la que esperábamos, pero seguiremos con nuestras reivindicaciones porque Redondela se merece un mejor servicio", apunta.

Bas considera que el municipio es un núcleo importante a nivel ferroviario, puesto que la estación de Os Eidos no solo da servicio a los 30.000 vecinos de la localidad, sino a otros concellos de su área de influencia como Soutomaior, Pazos de Borbén o Fornelos de Montes. "Disponemos de un gran edificio, moderno y funcional, pero con un servicio raquítico, que nada tiene que ver con la estación fuerte que todos queríamos. No estamos pidiendo nada imposible, tan solo que se dote a Redondela de personal y de las mismas frecuencias ferroviarias que Vilagarcía", indica el regidor local. El responsable municipal también argumenta su demanda ante las importantes afecciones que sufre el municipio por el paso de las infraestructuras ferroviarias, "pero después no se ve reflejadas en beneficios para los vecinos" .

La estación cuenta con una superficie de 775 metros cuadrados que se distribuyen en un amplio vestíbulo acristalado, una taquilla, dos locales comerciales de 30 metros cuadrados cada uno, tres aseos y las oficinas y dependencias para los empleados. Aunque la realidad es que el personal brilla por su ausencia.