La mejora del acceso al barrio de Cidadelle, en Chapela, por fin será una realidad después de veinte años de espera. Las obras de este nuevo vial comenzaron la semana pasada para dar respuesta a la un demanda de los vecinos de la zona desde hace más de dos décadas.

Los trabajos fueron adjudicados a la empresa Civisglobal, con un presupuesto de 178.114 euros aportados por la Diputación con cargo al Plan Provincial de Obras y Servicios. La actuación consiste en la construcción de un nuevo vial que se situará a unos cincuenta metros del actual acceso al barrio, en el camino de Costoia, por lo que quedaría independiente de la subida a Buraca. De esta forma se despejará notablemente el tráfico de vehículos en el cruce de la Avenida de Redondela donde confluyen ambos viales. La nueva calle tendrá una longitud de cien metros y ocho de anchura, con aceras a ambos lados, e incluirá todos los servicios como red de alcantarillado, pluviales, abastecimiento y puntos de luz.

Desde el gobierno local destacan el empeño puesto en conseguir sacar adelante este proyecto después de tantos años atascado en el Concello por motivo de las expropiaciones, que obligaron en algunos casos a recurrir a un proceso de expropiación forzosa. Una vez resuelto el tema judicial el gobierno local habilitó una partida en el presupuesto destinado a esta obra para poder iniciarlas cuanto antes.

"Como ya explicamos en su día a los vecinos, la actuación se encontraba pendiente de resolver las expropiaciones, para iniciar las obras lo antes posible ya que disponíamos de la partida presupuestaria consignada en los presupuestos para esta obra puesto que somos conscientes de la importante necesidad para la zona y del problema de seguridad vial existente", explica el alcalde, Javier Bas.

Con este proyecto se garantizará la seguridad tanto de los vehículos como de los peatones ya que se construye un nuevo vial, muy próximo al actual acceso al barrio de Cidadelle, con aceras a ambos lados. Los trabajos ejecutados en los últimos días en el camino do Xílgaro, con un amplio destierro, permite observar la dimensión que tendrá la calzada.

Desde el gobierno local afirman que esta actuación será una realidad gracias a las gestiones realizadas por los responsables municipales con el anterior presidente de la Diputación, Rafael Louzán.

Los vecinos de Cidadelle llevaban dos décadas reclamando la mejora de los accesos desde la Avenida de Redondela, puesto que en la actual calle apenas se pueden cruzar dos vehículos.