Resueltos al menos ocho robos de joyas y dinero en metálico en viviendas de la comarca del Val Miñor. Agentes de la Policía Nacional detuvieron ayer a un joven de nacionalidad albanesa como supuesto autor de los asaltos. Todos ellos perpetrados a lo largo de los últimos tres meses en casas unifamiliares habitadas de Baiona, Nigrán y Gondomar , según confirman fuentes de la investigación, en la que participan efectivos del puesto principal de la Guardia Civil baionés.

El arresto se produjo en Madrid, en la Estación Sur, cuando el presunto delincuente acababa de bajar del autobús que lo había trasladado desde Galicia para vender las alhajas. Los policías observaron una actitud sospechosa en el individuo, por lo que procedieron a identificarlo.

Comprobaron que portaba numerosas piezas de oro, más de medio kilo, así como 980 euros en metálico. Un botín que, al parecer, no iba acompañado de la correspondiente documentación que certificase su procedencia lícita.

De ahí que los agentes trasladasen al detenido a la comisaría para realizar más averiguaciones. Las pesquisas concluyeron que parte de las piezas habían sido sustraídas en un domicilio de la localidad de Nigrán. Su propietario las reconoció como parte de los efectos que le habían robado el martes.

Las investigaciones de los agentes revelaron además que el joven tiene prohibida la entrada en el territorio Schengen, emitida por Italia en 2014, y que pertenece a una banda organizada de ciudadanos albaneses cuya actividad delictiva consiste en llevar a cabo robos en viviendas en la comunidad gallega para posteriormente viajar a Madrid al objeto de vender los objetos sustraídos, dado que en la capital española se paga un precio más alto por el gramo de oro. El caso permanece abierto y no se descartan nuevas detenciones.

Las joyas intervenidas se hallaban cortadas, con las piedras preciosas separadas y la maquinaria de los relojes extraída. Hecho que hizo suponer a los policías que el arrestado se proponía vender la mercancía en el mercado negro del oro.

El modus operandi de los ocho robos que se le imputan al arrestado fue similar. Los asaltantes forzaron las ventanas para acceder a las viviendas, que previamente vigilaban para conocer los horarios de entrada y salida de sus moradores.