Las reparaciones por intentos de robo en las iglesias de Forcadela, Tomiño (Mosteiro) y en la capilla del Alivio, suponen un desembolso de unos 17.500 euros por parte de las respectivas parroquias.

El párroco de Forcadela, Estás y Figueiró, José Luis Portela Trigo, informó ayer que estos sucesos se cometieron en una misma noche de hace unos 15 días. Coincide la circunstancia de que los tres templos están situados en lugares apartados, donde apenas hay viviendas y que no son paso habitual de gente, a excepción de la iglesia de Tomiño, cerca de un centro escolar. La iglesia de Forcadela es una de las más afectadas. "Es la cuarta vez que entran en ella", relata el sacerdote. En esta ocasión destrozaron la puerta lateral tallada, partiéndola por la mitad. Los autores, doblaron el batiente de hierro (de 1 centímetro de grosor) de la puerta principal del templo. En su intento de abrir esta puerta dejaron una abertura de 10 centímetros de ancho. En arreglo que se está realizando incluye la sustitución de los laterales. Los delincuentes lograron entrar por la puerta lateral, accediendo a los cepillos que rompieron por la mitad al ver que sólo contenían monedas de bajo valor, que dejaron tiradas. Abrieron los cajones de la sacristía, tirando ropas, buscando objetos de valor. Abrieron el sagrario y lo destrozaron al utilizar una pata de cabra, a pesar de estar las llaves a la vista. Dejaron el copón abierto y con las formas, encima del asiento que ocupa el sacerdote. El gasto en Forcadela asciende a unos 15.000 euros. En la capilla del Alivio y en Tomiño se refuerzan las puertas con chapa de hierro. Los autores buscaban dinero y piezas que luego venden en Portugal. Hay denuncia ante la Guardia Civil.