El CEIP Fermín Bouza Brey de Ponteareas seguirá sin pista deportiva cubierta hasta el verano de 2016. La obra, prevista para este verano, ha sido pospuesta por el incumplimiento de los plazos marcados por parte de la empresa adjudicataria, según argumenta el gobierno local, y "para garantizar que los trabajos no coincidan con el desarrollo del curso escolar" afirma.

La obra inicial había sido adjudicada el pasado mayo por el gobierno del PP y contemplaba un presupuesto de 188.277 euros, financiados por la Diputación de Pontevedra a través del Plan Provincial de Obras y Servicios. El proyecto preveía que la pista polideportiva pasase de los 630 metros cuadrados que tiene actualmente a 1.022 , además de la construcción sobre ella de una cubierta de más de siete metros de altura sobre su pavimento, para que los alumnos puedan usarla en los recreos y en clase de Educación Física sin mojarse.

Al comprobar que la empresa adjudicataria no comenzaba los trabajos, la concejal de Obras, Chus Garrote, y el alcalde, Xosé Represas, contactaron con la compañía para exigirle que "cumpliese la responsabilidad que había adquirido en la firma del contrato".

El gobierno local explica que la empresa alegó problemas técnicos para ejecutarla según el proyecto y planteó realizarla de menor calidad que la propuesta, algo a lo que el ejecutivo ponteareano se negó exigiendo que se "respetase lo estipulado en los proyectos iniciales, tanto en el apartado técnico como en el económico" aseguran desde el ejecutivo.

Paralelamente, el arquitecto de la obra desaconsejó realizarla una vez iniciado el curso escolar, por lo que finalmente el gobierno local optó por proponer una renuncia, de mutuo acuerdo, que la propia empresa aceptó, una decisión que será comunicada en la junta de gobierno local el próximo lunes.

Desde el Concello aseguran que la obra será licitada nuevamente para que los trabajos den comienzo una vez finalice el actual curso escolar 2015-2016, de manera "que se puedan evitar accidentes innecesarios que puedan afectar a la seguridad de los alumnos y a los trabajadores del centro", señaló Garrote, que además se comprometió a "garantizar que esta obra esté finalizada antes del comienzo del curso 2016-2017".

Además, la edil de Obras asegura que los fondos aportados por la Diputación de Pontevedra no corren peligro porque la subvención establece que la obra puede ser ejecutada hasta el mes de diciembre de 2016, por lo que no hay riesgo de perder una inversión necesaria para este colegio, para el que además la comunidad educativa lleva años reclamando una reforma integral de su edificio principal.