A Bas le salieron las cuentas. Tras dos días de negociaciones, con un intento fallido de acuerdo entre los grupos de la oposición, el alcalde de Redondela podrá disfrutar de un sueldo de 45.000 euros al año gracias a los votos a favor del PP (9 ediles) y la abstención de AER (4), frente a la negativa de PSOE (6), BNG (1) y Redondela Pode (1). La concejala de este último grupo, Raquel Quintáns, insistió en su propuesta de que el regidor cobre "por ética" solo 27.240 euros, "tres veces el salario mínimo interprofesional".
La cifra finalmente aprobada partió del BNG, que defendió los 45.000 euros frente a los 55.000 que pretendía inicialmente Bas en el pleno de organización del pasado martes, una sesión que el alcalde interrumpió ante la necesidad de pactar. Ayer, en pleno extraordinario y urgente, el edil nacionalista Xoán Carlos González rechazó su propia iniciativa, al quedar desvinculada de las asignaciones a concejales y grupos políticos. Ese punto se votó aparte y ahí fue AER quien impuso sus números, con el apoyo del PP.
Así, en este mandato los concejales del gobierno con dedicación exclusiva percibirán de las arcas del Concello 23.000 euros al año; la dedicación parcial se retribuirá con 18.000. Los demás ediles tendrán una asignación de 5.184 euros, 8.100 en el caso de portavoces de la oposición. El cabeza de lista de AER, Ricardo Figueroa, justificó el apoyo de su grupo porque "se reducen notablemente los gastos de la corporación", que cifró en algo más de 200.000 euros anuales.
Por su parte, la portavoz del PP Carmen Amoedo recriminó a PSOE y BNG su "incoherencia" por tratar de rebajar el sueldo del alcalde, cuando hace cuatro años lo apoyaron y el gasto de gobierno era aún mayor en el bipartito.
Desde la oposición, PSOE, BNG y RPode coincidieron en criticar las asignaciones a los grupos políticos, que se reducen notablemente al punto de "asfixiar a los grupos pequeños", dijo el nacionalista Xoán Carlos González. Un diagnóstico que repitió el portavoz socialista Eduardo Reguera, quien recordó a Bas que "el PP está en minoría" y por tanto obligado a alcanzar acuerdos con los grupos de la oposición. En este sentido Reguera advirtió que el alcalde "tiene que hablar con todos y para eso está la junta de portavoces. Se acabó el hablar solo con unos u otros", zanjó el líder del PSOE.
Además, los socialistas animaron a Javier Bas "a que haga un gesto que sería valorado por los vecinos, rebajándose el salario como los regidores de Madrid, Barcelona o A Coruña".
Personal de confianza
La división del pleno quedó asimismo patente en el debate sobre la contratación de dos personas en calidad de cargos de confianza del gobierno local: una "coordinadora de concejalías" que actuaría como secretaria del alcalde, y otra responsable de "transparencia" que sería encargada de encauzar las nuevas exigencias legales en este ámbito. Aquí AER también allanó el camino al PP al abstenerse, no sin avisar de que los contratados serían "despedidos o revocados a la mínima", dijo José Crespo, edil del grupo independiente. Y es que los demás grupos de la oposición se mostraron suspicaces con la figura de "coordinador de concejalías" que en el pasado mandato ostentó la ahora edil del PP Carmen Amoedo, ya que para PSOE y BNG, su figura fue más de "control político" y "concejal no electa" que de apoyo al regidor. Los gastos previstos por el gobierno de Bas para estos puestos ascienden a 25.000 y 21.000 euros anuales.
