La regularización catastral que se está llevando a cabo durante las últimas semanas en Pazos de Borbén está provocando la ira de sus vecinos. El alcalde, Andrés Iglesias, anunció ayer la posibilidad de rebajar el tipo impositivo que se aplica desde el Concello al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) hasta el mínimo legal para rebajar la carga fiscal sobre sus vecinos.

El regidor local se mostró contrariado por la situación que está provocando la actual regulación tributaria del IBI. "La nueva regulación de este impuesto está siendo desproporcionada y con clara intención recaudatoria, sobre todo en el rural, donde puede tener efectos devastadores entre nuestros vecinos. Y por ahí no vamos a pasar", afirmó Iglesias.

El alcalde estudia diversas medidas para rebajar la presión fiscal sobre los vecinos, en especial las relativas al IBI. La primera, que pretende llevar al próximo pleno ordinario, afectaría al coeficiente multiplicador que impone cada ayuntamiento para el cálculo final del impuesto, fijado por ley para este municipio entre el 0,4 y el 0,5%, y que propone reducir al mínimo legal. Esta iniciativa reducirá hasta en un 30% el importe del recibo.

El Concello también ha puesto a disposición de los vecinos desde la pasada semana a un técnico del catastro para resolver todas sus dudas.