Se perdió en las fragas del Tea después de coger una bicicleta y echarse a rodar sin percatarse de los kilómetros recorridos. Los padres de una joven de 13 años de Salvaterra de Miño denunciaron en la Guardia Civil la desaparición de la adolescente después de haber perdido contacto con ella a las 9.30 de la mañana. Su aventura duró más de diez horas hasta que fue localizada por una perra de Protección Civil llamada "Bruma".

Adentrada la tarde y antes de que se hiciera de noche, la Guardia Civil avisó a Protección Civil de Ponteareas, que posee la única unidad especializada en la búsqueda de personas en la comarca y entraron en acción sus dos perras acompañadas de dos guías. Una de la perras se llama "Nube", y su especialidad es el venteo. "Huele en grandes áreas y distingue olores entre escombros", explica Jesús Rodríguez, responsable de Protección Civil de Ponteareas. La otra perra, que encontró a la niña, se llama "Bruma" y su especialidad es el olor de referencia. "Le enseñamos un rastro y lo sigue sin apenas fatigarse durante horas", añade.

En este caso, los guías que la acompañaban, Juan y Joaquín, le mostraron las marcas de unas ruedas de bicicleta. Las rodaduras mostraban una sola bicicleta y las huellas de unos pies, que podían ser de una joven, que, al parecer, en algunos momentos bajaba de la bicicleta y seguía a pie, para después subirse otro trecho, siempre a orillas del río Tea.

"Bruma" se hizo con el olor y lo siguió sin perderlo hasta que pudieron dar con la joven en las inmediaciones de Ponte Cordeiro, a varios kilómetros de su casa. Los guías no llevaban puesto el uniforme de Protección Civil y cuando la adolescente les vio se asustó todavía más de lo que se supone que estaba, tanto que les costó convencerla de eran miembros de Protección Civil y que la estaban buscando. Pero "Bruma" se quedó allí oliendo las proximidades, mirando y feliz, posiblemente contenta por haber completado con éxito su gesta.

Explica Rodríguez que detrás de cada éxito existen muchas horas de trabajo y adiestramiento. "Bruma llegó a nosotros cuando tenía ocho o nueve meses a través de una donación, y fue adiestrada para seguir a personas a través del rastro", indica. "Se ha demostrado que esta perra de raza labrador es excelente y estamos muy contentos de su trabajo, al igual que la de los demás animales de la unidad", añade.

La Unidad Canina de Protección Civil de Ponteareas está compuesta por cinco guías y cuatro animales, que trabajan de dos a tres días por semana de forma totalmente voluntaria.

"Esta unidad la hemos creado con apoyo del Ayuntamiento de Ponteareas para cubrir las necesidades de la comarca en cuestiones de desapariciones, pues en esta zona y alrededores no hay unidades caninas que hagan estas funciones", explica.