El banco de tapones del Baixo Miño, con sede en Tomiño, alcanzó ayer una nueva meta: la entrega de 3.000 euros al niño Gilbert, de Ourense, para tratamientos y elementos necesarios para paliar su sordera.
En el mismo acto se dio la bienvenida a dos de las tres niñas cuyas campañas ya han empezado. Se trata de la pequeña Marta, de 5 años, vecina de Tui, que padece Síndrome Delección 1p36. Candela es otra de las pequeñas, también tiene 5 años y vive en Pontevedra, padece encefalopatía hipotónica e hipoacusia neurosensorial. En tercer lugar está Iria, de 14 años y vecina de Taboadela (Ourense) que tiene parálisis cerebral. Ayer, por cuestiones médicas, no pudo estar en el acto.
Hubieron sorpresas, pues el banco de tapones ha nombrado miembros de honor a cinco de los niños que han recibido ayuda del colectivo y que podrán disfrutar, junto a sus familias, de un fin de semana en el camping O Muíño de Oia, por gentileza de su propietario, que es colaborador. Se trata de los pequeños Erik Pereira, Daniel Cid, Víctor Morais, Martiño Lomba y Samuel Mata.
El portavoz del banco de tapones, Manuel Pardo, destacó que el voluntariado "está en crecimiento y ya se han conseguido 400 puntos de recogida de tapones en Galicia" y provincias colindantes.
