Trece años después de que la fábrica de cerámica Alfares de Pontesampaio -conocida como Pontesa- cerrase sus puertas, los alumnos del colegio Manuel Padín Truiteiro han querido rendir un homenaje a esta histórica industria que durante décadas dio de comer a cientos de familias de la comarca. El trabajo de los escolares, en el que también colabora la fotógrafa Marta Moreiras, se expone desde ayer en el Multiusos de A Xunqueira bajo el título "Pontesa, lembranzas dunha fábrica". Los visitantes podrán recorrer la historia de esta factoría a través de fotografías antiguas cedidas por los vecinos y textos que ilustran desde sus inicios hasta su estado actual, vacía tras su cierre en 2001.

La iniciativa comenzó el pasado mes de noviembre cuando guiados por la profesora, Ana Aguiar, los escolares empezaron a diseñar la muestra y repartirse el trabajo. "La fábrica está vinculada a muchos de nuestros alumnos porque muchos de sus familiares trabajaron en ella", explica Aguiar. Siete meses después, el resultado del proyecto reúne 70 fotografías, acompañadas con textos, entrevistas y diferentes composiciones con las que estos alumnos de secundaria quieren rendir homenaje a una industria que llegó a emplear a 1.100 trabajadores en su mejor época, en los años sesenta y setenta.

A través de las instantáneas y los testimonios reales de antiguos trabajadores, la exposición refleja el desarrollo de la factoría desde su fundación en 1961, cuando era una de las fábrica más modernas del momento ya que estaba completamente electrificada y era pionera por su incorporación de la automatización al proceso industrial, hasta los peores momentos de su historia que llevaron al cierre en 2001 y al olvido actual. "Hay gente que guarda muy buen recuerdo porque trabajaron veinte o treinta años en la factoría. Algunos extrabajadores que acudieron con los alumnos a la fábrica para hacerse retratos en el interior de la nave decían que les daba mucha pena volver y ver todo vacío", indica la profesora, que agradece la colaboración vecinal. "Todo el mundo se volcó con el trabajo con entrevistas, fotografías y documentación. El proyecto salió adelante gracias a ellos, son los protagonistas", apunta Aguiar.

La jornada de inauguración contó ayer con un concierto ofrecido por el coro de alumnos del Manuel Padín Truiteiro, con la intervención de las profesoras de música del centro Raquel Sestelo, como soprano, y Paula Veiga, al piano.

La exposición estará abierta al público hasta el próximo día 27 y puede visitarse de lunes a viernes en horario de 9.00 a 14.00, excepto mañana y el viernes de esta semana que abrirá de 15.30 a 20.30 horas. Este proyecto, encuadrado en el programa Fotografía en Curso de la Xunta de Galicia y con la colaboración del Concello de Soutomaior, busca despertar entre los escolares el gusto y la atención por la fotografía, facilitándoles las herramientas teóricas y prácticas para descubrir este universo visual.