Dos de los agentes insultados, Enrique Goce y José Costas, a la vez delegados sindicales en la junta de personal del Concello de Baiona, muestran su preocupación por el asunto. Aseguran que las injurias de las sentencias no son las únicas, ni tampoco los policías municipales los primeros afectados. "Se falta al respeto a cualquier trabajador municipal, por no limpiar en un sitio, por una gestión administrativa, etc.", explican. Consideran que la justicia no solo debería considerar las difamaciones, sino también el medio por el que se lanzan. "Debería ser un agravante utilizar las redes sociales para ofender. La difusión es infinita", recalcan.