La aprobación inicial de la ordenanza contó con los votos a favor del PP; el PSdeG-PSOE se abstuvo y el BNG votó en contra. Esta última agrupación política presentó alegaciones al reglamento, al considerar que en el mismo no se tiene en cuenta la dispersión geográfica que caracteriza el municipio mosense.

El Bloque se opone, en su escrito, a la posibilidad que contempla el documento, de crear aparcamientos controlados en zona azul, y rechaza que se restrinjan las operaciones de carga y descarga en las zonas rurales, o que sea necesaria una persona adulta para pasear a los animales de compañía por la vía pública.

Además de haber presentado alegatos a la futura ordenanza, el BNG solicitó su anulación y que se redacte una nueva.