El presidente en funciones de la Comunidad de Montes de Trasmañó, Fernando Magdalena, presentó una denuncia ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil por los trabajos de tala que realizó una empresa encargada por los comuneros de la vecina parroquia de Cabeiro, en las inmediaciones del conjunto arqueológico de Monte Penide. La denuncia apunta a "un supuesto delito contra el patrimonio cultural, por daños ocasionados en las mámoas que se encuentran en dicho núcleo", según se indica en el procedimiento abierto.
Magdalena explicó a FARO que la comunidad de Cabeiro "vuelve a reincidir y atenta contra las mámoas" del yacimiento de Monte Penide, de unos 5.000 años de antigüedad. Asegura que "apilan la madera en la zona de influencia de las mámoas, acto totalmente prohibido en los permisos de Patrimonio". Además habrían utilizado maquinaria pesada junto a los túmulos prehistóricos, ya que "vemos las rodadas de la máquina al lado de estos". Las tareas se habrían hecho sin las preceptivas "cintas de área de protección ni presencia de un arqueólogo, tal y como indica el protocolo de actuación en Monte Penide", un informe remitido por el Concello a los comuneros de las parroquias implicadas, precisamente para evitar daños al patrimonio cultural.
"Para más inri", prosigue Fernando Magdalena, estos trabajos sin protección se habrían hecho "en las mismas mámoas por las que ya fueron detenidos los miembros de la directiva por el Seprona", unos hechos que ocurrieron en abril de 2013 y que dieron pie al establecimiento del protocolo de actuación.
Dicho protocolo, según indica la denuncia ante Seprona, "establece normas prácticas de cómo proceder en temas de rozas, podas, talas o cualquier actuación en la que pudiese verse inmerso el conjunto arqueológico".
El representante de los comuneros de Trasmañó añade que ya en diciembre, en la zona de Coto da Arca de Cabeiro, limpiaron el monte con maquinaria pesada.
