La Consellería de Educación pretende calentar el pabellón del IES do Pazo da Mercé, de As Neves, donde más de 200 alumnos reciben clase de Educación Física a bajas temperaturas en invierno, recuperando la instalación de los aerotermos existentes en lo alto de la infraestructura. Estos generadores de aire caliente llevan años instalados en el pabellón pero sin funcionar. Según el jefe territorial de Educación, César Pérez Ares, "no pueden ser usados al haber aumentado el número de instalaciones eléctricas en el centro".

Para que puedan volver a encenderse, Pérez Ares asegura que su departamento acometerá "este mismo año las obras de reforma de la instalación eléctrica en el IES do Pazo da Mercé de As Neves, al catalogar estos trabajos como prioritarios".

La unidad técnica de la jefatura territorial de Educación cree que la puesta en funcionamiento, de nuevo, de los aerotermos "podría ayudar a conseguir una solución a la situación del pabellón deportivo en la época de invierno".

Escepticismo

En el centro se muestran escépticos con esta solución que ya se aplicó en el pasado y que no consideran que sea eficiente, ya que los aerotermos están colocados en el techo de un pabellón mal aislado. El aire caliente, al ser menos denso, sube mientras que el frío desciende.

El instituto de As Neves está construido junto a la ladera de una montaña, por lo que, según Pérez Ares, "en su día fue necesario ejecutar canales para drenar el agua que baja de la montaña". A este respecto, el jefe territorial de Educación explica que "volveremos a insistirle al centro educativo en la necesidad de que mantenga limpios los canales por los que se drena el agua del monte (pegado a un lateral del pabellón), de manera que se pueda evitar la acumulación de residuos y, por tanto, de agua en las instalaciones".

Desde el centro aseguran que ya hacen todo lo que está en sus manos. Unos operarios se ocupan periódicamente de limpiar los canales que se atascan con hojas de los árboles y restos vegetales.

Los alumnos se quejan a diario del frío que pasan en el pabellón, al estar mal aislado y por la humedad que genera el riachuelo canalizado en su interior.

El pabellón había sido construido en fases, en el mismo lugar en el que ya existía una pista abierta al aire libre. Desde 1992 que se ejecutó, Educación asegura que "su cubierta ya se reparó en tres ocasiones". Además, cifra su inversión en el conjunto del instituto en 172.800 euros, desde 2009. Señala la ejecución de la red de datos, la reparación de los muros exteriores, la reposición de la cubierta y la reparación de falsos techos.