Madres y sus hijos estudiantes, desempleados o amas de casa son los perfiles que predominan entre los vendimiadores que han estrenado la recogida de uva albariña de la DO Rías Baixas. Un total de 130 personas trabajarán durante las próximas tres semanas para Bodegas La Val, abanderada en la recogida estos días en su finca de Arantei.

La subzona del Condado es la que abre habitualmente la vendimia en las Rías Baixas y esta bodega de Salvaterra acostumbra a ser la primera. "Se ha completado la maduración y los parámetros son óptimos", explica el gerente, Fernando Bandeira, quien aclara las razones: "Esta finca de Arantei, de 35 hectáreas, reúne unas condiciones especiales tanto por su ubicación, orientación como por la calidad del suelo, que hacen que la uva madure antes".

La única ventaja de ser los primeros es que en caso de inclemencias meteorológicas en los próximos días, "nosotros ya la tendremos segura en la bodega". Su previsión es alcanzar los 500.000 kilos de uva.

Sus vendimiadores llevan trabajando desde el jueves. Recogen uva hasta primera hora de la tarde y los domingos descansan.

Más tardía, como de costumbre, se prevé la vendimia en las bodegas de As Neves. Adegas Luz estima recoger su cosecha a finales de septiembre. "Vamos quince días por detrás de las demás con el propósito de buscar el equilibrio entre el grado alcohólico y la acidez", explica Enrique Fernández, copropietario de la bodega. "Nuestra vendimia no durará tanto como la de otras bodegas, en tres o cuatro días habremos acabado", comenta Fernández, quien estima que la producción será "normal, no tan exagerada como la de 2011, pero muy superior a la del año pasado".

Por su parte, en bodegas Coto Redondo prevén el inicio de la vendimia a partir del 24 de septiembre. No obstante, la fecha dependerá del "tiempo en los próximos días y de la graduación". Avanzan los autores del Señorío de Rubiós que "la uva está muy buena y va a entrar con buen grado porque fue un año con lluvias al principio y luego tuvimos sol... y eso ha ayudado".