Valença do Minho fue testigo ayer de una masiva muestra de dolor en los actos fúnebres oficiados por el alma del bombero Fernando Manuel de Sousa Reis, de 50 años, perteneciente desde hace 25 años a la Asociación de Bomberos Voluntarios de Valença do Minho. Cientos de personas se concentraron en el exterior e interior de la nave del parque de los bomberos, donde se ofició una misa de cuerpo presente, después de que compañeros lo velasen.
El Ministro del Interior de Portugal y el Secretario de Estado de Negocios Extranjeros fueron dos de las autoridades que anunciaron su presencia en las honras fúnebres. El presidente de la Cámara, Jorge Mendes y demás corporativos de Valença do Minho; representantes de organismos oficiales de España en Valença y de Portugal; alcalde y miembros de la corporación de Tui, vecinos de Tui y Valença. acudieron al sepelio.
El féretro, trasladado en el vehículo más antiguo del parque de Bombeiros, llegó al cementerio valenciano acompañado a pie por familiares, autoridades y bomberos de diversas localidades del Norte de Portugal, así como de Protección Civil de Tui.
El voluntario falleció el pasado jueves, a causa de las graves quemaduras de tercer grado que recibió cuando actuaba en un incendio en la parroquia valenciana de Sanfins, el pasado 29 de agosto.
En la homilía del oficio celebrado ayer, se le citó como "una de las vidas sacrificadas en el infierno incandescente de los incendios con los que manos asesinas destruyen nuestro país". Se ensalzó su valor y la entrega de su vida por los demás.
