La parroquia redondelana de Saxamonde acogió ayer la primera edición de la Feira de Cousas da Horta e da Casa, una iniciativa en la que los vecinos de la zona tuvieron la oportunidad de despachar sus productos agrícolas, y al mismo tiempo, deshacerse de los objetos de todo tipo que solo ocupan espacio en las casas cuando ya no tienen utilidad. De esta forma, pequeños electrodomésticos, cuadros, libros, juguetes, artículos infantiles y una gran variedad de artículos sin uso tuvieron una segunda oportunidad al ser adquiridos por otras personas.

"Las modalidades de intercambio en la feria son variadas. Quien quiera pone a la venta su excedente agrícola y diversos objetos de la casa y, en otros casos se pueden cambiar estos elementos por otros o por servicios", explica Paulo Jablonski, uno de los organizadores de la cita. Desde el Centro Cultural Chan das Pipas consideran esta propuesta como una oportunidad para que los vecinos establezcan relaciones que en el pasado eran frecuentes de cambio entre bienes y servicios y viceversa. "El tipo de intercambios, monetarios o no, es a gusto del consumidor y del vendedor", apunta Jablonski.

Uno de los puestos con más éxito fue el de productos naturales, con una amplia exposición de cremas, esencias y aceites de todo tipo elaborados de forma artesanal a partir de especies vegetales. "La gente cada vez se interesa más por este tipo de producto porque es totalmente natural y carece de efectos secundarios", apunta la naturópata Siegrun Bischof, que además de atender su stand, impartió una conferencia sobre el uso de las plantas para mejorar y conservar la piel.

Las mermeladas caseras también tuvieron una importante demanda en la feria. "La de tomate y pimientos se vendieron bien porque son difíciles de encontrar. Ambas combinan muy bien con los quesos", comenta Liliana Carro, que las elabora en casa de la manera tradicional, sin conservantes ni colorantes.