La mayor factoría tudense en número de puestos de trabajo, Nor Rubber S. A. L., con 98 trabajadores y 110 socios (entre trabajadores y extrabajadores), dedicada a la transformación de caucho y única en España fabricante de bandas metálicas que sirven, entre otras cosas, para la protección en diferentes embarcaciones o para transporte de material de diversa índole, concurre a varios proyectos a desarrollar en Malasia, Argentina, Chile, Argelia, Inglaterra, Francia y Alemania, dentro de la renovación anual de cartera de pedidos.

El director general de la sociedad, José Manuel Quintana, afirma que las perspectivas son buenas "para mantener nuestros 98 puestos de trabajo, siempre con ayuda institucional y financiera", pues reconoce que a pesar de las expectativas positivas, persiste el problema de "falta de financiación bancaria para poder hacer frente al pago de la adquisición de la materia prima y también para soportar los efectos que causa el retraso en el cobro de facturas a los clientes".

La meta que se han marcado en estos momentos es "sobrevivir, intentando superar este año". Hay trabajo en la factoría de Areas (Tui) donde se está elaborando el pedido de bandas transportadoras y defensas para catorce remolcadores del canal de Panamá; una carga laboral que les llegó a través del pedido realizado por Astilleros Armón. En la actualidad se ha entregado el 50% del encargo.

Las previsiones para este año 2013 fijan el importe de la facturación en unos 7,5 millones, lo que viene siendo un 10% menos que en el año anterior.

La cartera de pedidos que se renueva anualmente contempla varias expectativas que corresponden a proyectos a los que optan para fabricación de bandas transportadoras. Uno de ellos está centrado en Malasia. Otras posibilidades surgen en Argentina, Chile, Argelia, Inglaterra, Francia y Alemania. "En estos momentos estamos en fase de presupuestos y estamos bien posicionados", manifiesta Quintana, sin dar más pistas en esta etapa en la que la competencia está al acecho.

Quintana comenta brevemente el realismo nacional, sin trabajo alguno, lo que obliga a la firma tudense a "buscar todas las posibilidades fuera del país".

En estos momentos no puede destinarse inversión a maquinaria o instalaciones. Los puestos de trabajo son lo primero.

El sistema que sigue la sociedad es realizar un contrato de relevo por cada jubilación.

Como se ha constatado, los productos que se fabrican en la factoría la convierten en una industria competitiva a nivel mundial. Su departamento de investigación y desarrollo realiza ensayos sobre cada pedido.