La guardería pública proyectada para Chapela podría trasladarse a la parroquia vecina de Trasmañó. El alcalde redondelano, Javier Bas, contempla esta opción si finalmente los distintos colectivos sociales y los grupos municipales rechazan su ubicación en un bajo del colegio Alexandre Bóveda, situado en el barrio de Angorén.

El gobierno local no está dispuesto a perder la oportunidad de disponer de una escuela infantil para dar servicio a los vecinos de Chapela después del compromiso mostrado por la Consellería de Traballo e Bienestar y, aunque la primera opción para albergar este servicio es el local en las instalaciones del colegio de Angorén, se estudia como alternativa el edificio del antiguo centro escolar de Trasmañó, actualmente sin uso.

Bas explica que la planta baja del CEIP Alexandre Bóveda es el único espacio disponible en Chapela que encaja con el proyecto de Benestar, aunque ante el rechazo suscitado por la asociación de Anpas de los colegios de la parroquia, así como otros colectivos sociales y el PSOE, propone trasladar la escuela infantil a Trasmañó. "Plantearemos esta opción en el próximo Consello Parroquial de Chapela para ver qué opinan porque no se puede perder esta oportunidad", indica Bas.

El alcalde reconoce que esta opción "no es la ideal" por sus complicados accesos y lejanía respecto al casco urbano de Chapela, que obligará a las familias a trasladar a los niños en coche, aunque cuenta con aspectos positivos como unas instalaciones adaptadas para uso escolar en las que apenas habría que realizar obras, por lo que reduciría considerablemente el coste de la actuación. "Se podría plantear como una guardería provisional para que en un futuro a medio plazo, si cambia la situación económica y el Concello puede hacer frente a la compra de un terreno en Chapela, se pueda trasladar al núcleo urbano", explica.

El Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar se comprometió a poner en marcha el próximo año una escuela infantil con 61 plazas en Chapela, una actuación para lo que destinaría un presupuesto máximo de 610.000 euros. Sin embargo todavía falta por resolver su emplazamiento así como el convenio que marque el coste que le corresponderá asumir al Concello para su funcionamiento.

La opción del colegio de Trasmañó obligará a modificar el plan Marisma Máis, puesto que contemplaba la rehabilitación de este inmueble como centro de día para la atención de las personas mayores.