La tromba marina que el pasado sábado entró desde el mar y azotó la costa de A Guarda, llevándose las cubiertas de dos naves en Catanga (Camposancos), causó también un importante destrozo en el tramo de la senda litoral formado por la pasarela de madera.

Este fenómeno meteorológico arrancó unos 30 metros de la pasarela situada a la altura de O Seixal. Parte de sus restos aparecieron a más de 50 metros de distancia del lugar. Se aprecia que existen más tramos que están dañados.

La senda es muy frecuentada en todas las épocas del año, por lo que el alcalde José Manuel Domínguez Freitas se puso en contacto ayer mismo con el Servizo Provincial de Costas, dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación e Medio Ambiente, para informar de lo sucedido y solicitar la reposición de la pasarela.

El responsable del servicio provincial aseguró que será reparada con la mayor urgencia.

El regidor solicita a los muchos usuarios que a diario recorren la senda que, en la zona de O Seixal, extremen las precauciones a fin de evitar cualquier posible accidente.

Mejoras

Por otra parte, el regidor ha informado de diversas obras que se van a iniciar. Se trata de la colocación de bandas disuasorias de velocidad en la calzada de diversos puntos del municipio, dentro de las medidas estimadas de seguridad vial.

También se iniciará la urbanización de la rúa Lugo, que comunica la rúa Ramón Sobrino con la de Ezequiel Ordóñez. En una calle de corto recorrido y, en este caso, está prevista la reposición de las canalizaciones de la red de saneamiento, abastecimiento de agua, conducción de pluviales, cableado y colocación de pavimentación en piedra.

Otra actuación a llevar a cabo en breve es la pavimentación de la acera desde O Castro a Pancenteo, en el límite con O Rosal.